Thierry Ségur, curiosamente igual que otros dessinateurs de fantasía heroica francesa como Christophe Arleston o Didier Tarquin ("Lanfeust de Troy"), nació y se crió en exóticas tierras lejanas, en la caribeña colonia francesa de Martinique. Colaborador desde sus inicios de la revista "Casus Belli", primer semanario de juegos de rol y simulación de Francia, su relación con el guionista Bruno Chevalier empezó con la serie humorística en blanco y negro "Kroc le Bô", que parodiaba la fantasía típica de Dungeons & Dragons para "Casus Belli". A partir de 1987, y durante cinco años, su labor profesional se centró únicamente en la trilogía de las "Leyendas de los Pueblos Olvidados", con puntuales participaciones en otros proyectos como, por ejemplo, el story-board de una película de Christophe Gans. Después, cinco largos e inexplicables años de silencio que solamente se interrumpieron por un trabajo con Igor Szalewa y otro con Pierre Bettencourt ("Le Roi des Méduses") para volver después y de nuevo al oscuro olvido y al anonimato.