La sociedad oscura y cruel de los elfos oscuros, los drow, es uno de los iconos que el escritor R. A. Salvatore ha dejado para la posteridad de la literatura fantástica. Los seis volúmenes de la serie “La Guerra de la Reina Araña” se sumergen en el inquietante mundo de Menzoberranzan para narrar la caída y resurgimiento de la malvada raza drow.

image1En el corazón de Menzoberranzan, hay un secreto que amenaza con destruir la ciudad más importante de los elfos oscuros. ¿Qué sucederá cuando todos los enemigos que la rodean lo descubran?

Si hay un personaje asociado al escritor norteamericano Robert Anthony Salvatore, ese es Drizzt Do’Urden, segundo hijo de la casa drow Do’Urden de Menzoberranzan, exiliado por voluntad propia de la Antípoda Oscura en el mundo de la superficie donde, como seguidor de la diosa Mielikki, se ha labrado una buena reputación por el norte de la Costa de la Espada y la Columna del Mundo. Sus aventuras, junto al bárbaro Wulfgar, el enano Bruenor Battlehammer, la joven Cattie-brie, el mediano Regis y la pantera mágica Guenhwyvar se han narrado en el mundo de fantasía de los “Reinos Olvidados”, en docenas de novelas que han vendido miles y miles de volúmenes en todo el mundo (las series “El Elfo Oscuro”, “El Valle del Viento Helado”, “El Legado del Drow”, “Sendas de Tinieblas”, “Las Espadas del Cazador”, “Los Mercenarios” y, recientemente, “Transiciones”).
Drizzt es un drow, un elfo oscuro, miembro de una raza caótica, retorcida e imprevisible temida en toda la Infraoscuridad, sin duda las más odiadas criaturas de la Antípoda Oscura cuyo poder y crueldad sin par muy pocos se atreven a desafiar. Bajo la guía de la diosa-araña Lloth dominan con puño de hierro el mundo subterráneo, regidos por su particular código social de casas plagado de traiciones y engaños, mientras buscan el momento y la ocasión de extender su poder hasta el mundo de la superficie de Faërun.

La premisa de “La Guerra de la Reina Araña” es sencilla: ¿y si los oscuros drow se vieran privados del favor de sus dioses? ¿y si la Reina de la Red de Pozos Demoníacos Lloth diera la espalda a sus sacerdotisas? La sociedad drow sería débil y su ciudad más importante, Menzoberranzan, ciudad de esplendor y crueldad, la joya más brillante del vasto mundo subterráneo conocido como Antípoda Oscura y emporio principal de la siniestra raza de los elfos oscuros, estaría expuesta a la destrucción a manos de sus enemigos.
A partir de esta idea inicial la obra presenta un ciclo de caída y renacimiento narrado en seis capítulos (Desintegración, Insurrección, Condenación, Extinción, Aniquilación y Resurrección) que dan título a cada uno de los libros. Situada catorce años después de la Era de los Trastornos del 1358 CV, uno de los eventos más cruciales de los Reinos Olvidados (antes del Spellplague que marcó el paso a la cuarta edición de éste escenario de campaña del juego de rol de Wizards of the Coast “Dungeons & Dragons”), la serie sitúa a distintos personajes de la orgullosa sociedad drow en la encrucijada de una guerra civil. Acosados en su debilidad por enemigos externos, rebeliones de esclavos y el oportunismo, la crueldad y la ambición de los mismos drows, los elfos oscuros deberán esclarecer cuanto antes los motivos del silencio de su diosa y qué ha ocurrido en el sexagésimo sexto Plano del Abismo, el reino de Lloth, antes de ver destruida su sociedad.
La trama, repleta de alianzas formadas y disueltas, traiciones y engaños, también sigue el enredo tejido por los dioses, y llega a mostrar sucesos tan sorprendentes como un combate abierto entre dioses que incluye a Vhaerun, Selvetarn o Lloth, o la elección de la sucesora de la Reina Araña, la Yor’thae, entre las tres aspirantes Halisstra, Quenthel y Danifae.
Los personajes, abundantes, dotan a la historia de todos los elementos necesarios para mostrar una sociedad drow más elaborada y compleja de lo que el mismo Salvatore había podido enseñar en sus novelas de Drizzt, pero la conclusión de la trama no tiene ninguna repercusión real sobre ella. Los cambios en Menzoberranzan son nulos, aunque el final de la historia fulmina a varios de los personajes principales sin ningún remordimiento… pero dejan la puerta abierta a futuras resurrecciones. E incluso algunos de los protagonistas, como Gomph Baenre y Pharaun Mizzrym, aunque drow malvados por naturaleza, consiguen crear cierta empatía con el lector.

“La Guerra de la Reina Araña” es una serie formada por seis libros autoconclusivos enlazados en una única historia, escritos a su vez por otros tantos autores (Richard Lee Byers, Thomas M. Reid, Richard Baker, Lisa Smedan, Philip Athans y Paul S. Kemp), todos ellos bajo la tutela de R. A. Salvatore, inspirados por la fértil imaginación del escritor de referencia de los “Reinos Olvidados”, con el permiso de Ed Greenwood. Cada uno de los seis escritores aporta a la saga su estilo y su forma particular de escribir, cosa que convierte “La Guerra de la Reina Araña” en una lectura heterogénea y no lineal aunque mantiene un todo coherente a lo largo de las seis novelas. Y tras esta saga es muy recomendable continuar con la trilogía de Elaine Cunningham iniciada con “La hija de la casa Baenre”, que amplía con mucha más profundidad a la sociedad drow y se complementa perfectamente con lo que retrata Richard Lee Byers en “Desintegración”.

La Guerra de la Reina Araña I y II
Autores: Richard Lee Byers, Thomas M. Reid, Richard Baker, Lisa Smedan, Philip Athans y Paul S. Kemp.
Colección: Reinos Olvidados
Fecha Publicación: 15/09/2009 y 20/10/2009
ISBN: 978-84-480-3820-5 y 978-84-480-3821-2
Cubierta: Estuche Rústica (portadas ilustradas por Gerald Brom).
Precio: 29.85 euros