A parte de para hablar de cine, creo que estas reseñas que hago deben servir para que quien se fíe de mi buen o mal juicio decida si una película en cuestión le interesa o no. En esta ocasión creo que es importante advertir que quien quiera ver una película de acción, con un ritmo trepidante y la adrenalina desbocada ésta NO es la película que quiere ver.

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Título original: The American.
País: EEUU.
Duración: 105 min.
Género: Thriller.
Interpretación: George Clooney (Jack), Violante Placido (Clara), Thekla Reuten (Mathilde), Paolo Bonacelli (padre Benedetto).
Guión: Rowan Joffe; basado en la novela “A very private gentleman” de Martin Booth.
Producción: Anne Carey, George Clooney, Ann Wingate, Jill Green y Grant Heslov. Música: Herbert Grönemeyer.
Fotografía: Martin Ruhe.
Montaje: Andrew Hulme.
Diseño de producción: Mark Digby.
Vestuario: Suttirat Anne Larlarb.
Distribuidora: Universal Pictures International Spain.
Estreno en USA: 1 Septiembre 2010.
Estreno en España: 17 Septiembre 2010.

Dicho lo dicho hay que reconocer que “El americano” es una película arriesgada, peculiar, con su propio estilo, con una identidad propia, es decir, está en las antípodas del cine comercial que hacen como churros los grande estudios y se sitúa de alguna manera al otro lado del espectro de lo que Steven Soderbergh ha hecho con la saga de “Ocean’s eleven” y hago la comparación porque en ambas aparece George Clooney y porque, dada su condición de director “todoterreno”, seguramente a Soderbergh le hubiera encantado firmar este “El americano”.

El comienzo, unos minutos de presentación antes de los créditos iniciales, es ya una declaración de estilo. El director holandés Antón Corbijn, creador de algunos videos destacados de grupos como U2, Coldplay o Depeche Mode parece ya advertirnos de que no estamos ante una película de acción y suspense al uso. Ya la cámara ralentiza las tomas, el silencio se reduce a lo mínimo desapareciendo la banda sonora y somos testigos de un preámbulo en el que no se explica demasiado, pero que resulta impactante y efectivo y que nos obliga ya a participar en el relato  ¿quién es Jack? (el personaje de George Clooney) y ¿por qué actúa como lo hace? No nos lo van a explicar claramente, así que ya podemos espabilar para deducirlo.

Yo sí os avanzo que Jack es un asesino norteamericano  a sueldo de la mafia italiana de avanzada edad ya para su oficio que se encuentra en Europa llevando a cabo sus últimos trabajos y con la aspiración de retirarse. El resto hay que descubrirlo viéndola, pero avanzo que tiene más de drama personal y suspense que de película de acción.

La productora independiente Focus Pictures ha querido retornar de algún modo a ciertas películas de los 60’s y 70’s como “Bullit” o “La conversación”  (incluso a los westerns de Sergio Leone, atentos al homenaje a “Hasta que llegó su hora”) y desarrolla de manera minuciosa y realista un argumento que se concentra en unos días únicamente en los que podemos comprender la soledad en la que vive Jack, lo complicado y distinto del ambiente en que se mueve, el estado de alerta perpetuo y obsesivo en el que se encuentra, lo detallista que es trabajando….Las escenas avanzan tomándose su tiempo, la película es lenta, sí, pero no aburrida (al menos para mí no lo es, hay muchos detalles en los que fijarse y ninguna toma es superflua, ni siquiera aquellas en las que se ve como va montando minuciosamente sus armas) y la ambientación, la atmósfera de suspense del relato tienen también su importancia. Jack se mueve por pueblos italianos, poblados por gentes rurales, pero la amenaza se encuentra escondida detrás de cada esquina y cada persona con la que se relaciona. Cada diálogo, cada silencio, cada mirada y cada detalle visual o auditivo puede tener su importancia.

Me gusta especialmente como el director y la interpretación de George Clooney hacen que se cree la tensión precisa para que la película interese y eso aún cuando lo que caracteriza a Jack es su frialdad, su comportamiento aséptico, en realidad actúa lo mínimo en imprescindible y mientras tanto se oculta en las sombras. Podríamos decir que es un personaje distante y gélido como un témpano de hielo, como corresponde a su profesión, pero en el fondo está cansado de serlo y de pronto surge una posibilidad para empezar de cero. En ese sentido, ese drama personal, me ha recordado al de Robert de Niro en “Heat”. De pronto, un asesino, un criminal despiadado nos gana, lo comprendemos y deseamos su redención. Es el milagro del cine bien hecho. Ya digo, tanto George Clooney como el director tienen mucha culpa de este “milagro”.

También hay que destacar que esta es una película atípica en la que no se narra, no se explica y no se nos da una visión omnisciente de lo que está pasando. Vemos, oímos y sentimos lo que ve, oye y siente Jack, asistimos a lo que hace y a lo que le pasa, por así decirlo somos él o le acompañamos así que no nos queda más remedio que intuir lo que pasa, deducirlo y extraer nuestras propias conclusiones. Hay una suerte de suspense en todo ello que convierte a la película en un puzzle y hay espectadores a los que les gusta ese tipo de reto (a mí por ejemplo).

Pienso que sí podría haberse logrado una mayor carga emotiva en el relato, pero seguramente no es lo que querían filmar, por lo tanto la película es lo que es, una rara avis cuyo estilo encandilará a unos y dejará indiferentes a otros, pero en cualquier caso resulta una propuesta atípica y muy particular, una película a contracorriente…..y ya sabemos qué pasa con este tipo de películas, quizás no sean un éxito en taquilla, pero terminan convirtiéndose en filmes de culto. George Clooney me parece (no sólo por esto) un gran actor y también un tipo muy inteligente.