Yermo Ediciones ha publicado “Las Crónicas de Excálibur“, un primer volumen que recoge los dos primeros álbumes de las crónicas artúricas versionadas por los autores de cómic francobelga Jean Luc Istin y Alain Brion, y es una más que sugerente leyenda versionada de un modo muy próximo a la nueva ola de fantasía adulta.

Las Cronicas de Excálibur Vol. 01

Guión: Jean-Luc Istin
Dibujo y color: Alain Brion
Editorial: Yermo Ediciones
Encuadernación: Cartoné
Páginas: 128 color
ISBN: 978-84-943502-3-8
Precio: 30 euros

El mago Merlín recibe de manos de la Dama del Lago la legendaria espada Excálibur, capaz de dar la victoria al guerrero que la esgrima. Merlín decide entregarla a Uther Pendragón, el líder de los britanos, con la condición de que la use para conseguir la unión de todos los pueblos de Bretaña… y sin darse cuenta pone en marcha una serie de acontecimientos que cambiarán para siempre la historia del mundo. Jean-Luc Istin y Alain Brion nos narran los primeros años de la leyenda artúrica, dotándola de una original visión historicista y reflejando a los grandes personajes que forman parte del folclore europeo, como Merlín, Morgana o el mismo rey Arturo, con viñetas que son verdaderas obras de arte.

El ciclo artúrico es, posiblemente, uno de loas más revisitados a lo largo de la historia de la humanidad, y de la fantasía en particular. He perdido la cuenta de cuántas versiones, cinematográfica, literaria o “tebeística” he podido disfrutar a lo largo de mis 39 años de vida, pero por innumerables que sean estas versiones, y reinvenciones, el mito siempre ha permanecido fresco en el imaginario popular y cada dos por tres se nos ofrecía una nueva versión, algunas más atada a la versión histórica y otras que, bueno, podían transportarnos al futuro (“Camelot 3000”) o hacer que deseásemos arrancarnos los ojos de sus cuencas (“Primer caballero”). Por suerte estas revisiones artúricas también nos han ofrecido grandes momentos que respetaban la esencia del mito y lo engrandecían aún más, así el cine nos ofreció “Excálibur” mientras que literariamente hablando fue la saga de Las Nieblas de Avalón, de Marion Zimmer Bradley, la que elevó el nivel de las adaptaciones hasta, bueno, la excelencia. Recientemente Random House publicó los libros de M. K. Hume, una trilogía dedicada a Arturo y otra a Merlín que tuvieron una excelente acogida. Pero el mundo del cómic se quedaba algo cojo en cuanto a adaptaciones, echo en falta poder recomendar un cómic diciendo “es la mejor adaptación artúrica que he leído”, y eso a pesar de que disfruté muchísimo con Camelot 3000, pero una adaptación más dogmática era algo que se me resistía… hasta ahora. ACTUALIZACIÓN: aunque aún es un título que tengo pendiente de leer dejar fuera a El Príncipe Valiente, de Harold Foster, haya sido algo injusto, intentaré remediar esa laguna.

Las Crónicas de Excálibur es un proyecto realizado por el guionista Jean Luc Istin y el dibujante Alain Brion que Soleil comenzó a publicar en 2012 y que, por el momento, ha visto publicados tres volúmenes (Pendragón, Cernunnos y Luchar) cuyos dos primeros se recogen en esta maravilla de tomo que nos presenta una nueva versión del ciclo artúrico y que, además, aúna algunos de los detalles más interesantes de las obras mencionadas anteriormente. Así veremos cómo Merlín intenta unir a los pueblos británicos bajo el mando de un sólo rey, Uther Pendragon, al que concederá el uso de Excálibur. Desgraciadamente el futuro de Uther está destinado a ser trágico ya que la Diosa tiene  planes para que de la unión de Uther e Igraine naza Arturo, el verdadero rey destinado a unir Britania, aunque como podremos ver en este volumen no será nada sencillo ya que las fuerzas que se oponen a los druidas de Avalón son muchas, poderosas, peligrosas y motivadas. Así veremos cómo los estragos del Patricio (un devoto cristiano) regarán de sangre Britania o cómo los pictos se unen bajo el estandarte de Cernunnos o cómo Morgana

No quiero avanzaros más la trama, porque os garantizo que merece la pena, y mucho, el dejarse llevar de nuevo por una historia que debería ser vieja, pero que suena fresca y original, con un dibujo espectacular, realista y contudente a partes iguales por parte de dos grandes autores que aún tienen mucho que contarnos, aunque avanzan la lucha del cristianismo contra los ritos paganos, la posición de la mujer frente al patriarcado, etc.

Jean-Luc Istin está más que acostumbrado a trabajar con los personajes artúricos y a mezclar fantasía y realidad (no en vano Yermo Ediciones ya ha publicado el primer volumen de World War Wolves: Dios tiene gracia donde mezcla un futuro apocalíptico en Estados Unidos y una invasión de hombres-lobo en un cómic altamente recomendable), dirige una colección de títulos de corte fantástico para Soleil, donde no sólo ejerce de editor, sino que publica series como Aleph, Merlin, Les Druides, Elfes, Durandal y Le Crepuscle des Dieux. Títulos que me encantaría ver por aquí próximamente, ya que habiendo leído dos trabajos suyos debo reconocer que es un autor muy interesante.

Por su parte, Alain Brion tiene una biografía no tan extensa como Istin, pero no será por falta de calidad, y es que estamos ante un artista que cambia su estilo de acuerdo a los proyectos en los que trabaja, siendo más que capaz de trabajar en proyectos de corte fantástico así como en otros de corte ci-fi sin titubeo alguno, su trabajo en Les Insurgés d’Edaleth es una buena prueba de ello, aunque con echar un vistazo a esta primera crónica de Las Crónicas de Excálibur quedaréis tan convencidos como yo de su valía.

Si a esto le sumamos un volumen precioso, de gran tamaño y una excelente presentación, pues sólo podríamos lamentar que haya que esperar hasta septiembre para poder disfrutar de la siguiente entrega.

Visto lo visto estamos ante, posiblemente, una recomendación inexcusable para todos aquellos que, como yo, disfrutéis con las distintas versiones de Arturo, yo estoy deseando ver por dónde nos llevarán Istin y Brion en las próximas entregas.